miércoles, 12 de marzo de 2008

AL DESPERTAR (Calpe, 1996)

¿Sabe el cielo al soñarse
que al despertar habrá rumor de olas?
¿Sabía la piel pura, sin la hiedra del miedo
ni el musgo de la duda
que al despertar habría
labios vivos buscándola?

A veces cielo y mar se funden
como en un Azul único,
un único universo
sin ansia de horizontes.

A veces, piel y labio
buscan la misma flor
blanca y desnuda,
un universo íntimo
que no desea límites,
roca con alma de gaviota,
montaña huída que no conoce sombras.

Al despertar buscan la última luna
o sueñan con ser isla.

Isla callada y libre
donde mueren las olas
y los amantes nacen.