miércoles, 3 de octubre de 2007

ADIOS, AMANTE (Roskilde, 1996)

Un pájaro de noche se ha volado.
Se ha volado sin viento. Adios, amante.

Color de olvido siento en los zaguanes de mi alma.
El sol se abre y tus senos juegan como niños dormidos.
No siento más que amor o su tortura.
Vacío de mí vuelvo a ser tu cripta.

Un lobo de deseo aúlla en mi luna.
Ha devorado pieles que son nuestras,
pieles de medianoche u horizontes caídos.
Profundos como cielos boca abajo son tus ojos,
infiernos de belleza casi líquida.

Hay un camino muerto tras mis pasos.
Esta luz se consume. Adios, amante.
Debo volver a ser sólo una estrella.

No hay comentarios: